Fortaleza, belleza y durabilidad: estas son solo algunas de las palabras que vienen a la mente al pensar en el reino de Asgard.
Ello se debe a que tanto su gente como su arquitectura reflejan tales cualidades, lo cual es una de las muchas razones por las que los habitantes de Midgard (más conocida como la Tierra) acabaron venerando bajo el nombre de «dioses nórdicos» a algunos de los seres más poderosos de Asgard. Los asgardianos son devotos de muchas cosas relacionadas con el combate, entre las que se incluyen guerreros, hazañas de fortaleza en combate y actos honorables; y una forma de hacer patente esa devoción es crear estatuas con las que honrar a los guerreros que han llevado a cabo alguna notable gesta particularmente gloriosa.
La estatua de este santuario fue esculpida con el mayor de los cuidados y una extrema atención por los detalles para que irradiara fuerza, belleza y una firme determinación. Además, el lugar prominente que ocupa en la estructura general del santuario ejemplifica la dualidad del papel que cumple un guerrero en la sociedad asgardiana: a la par que cuida con esmero de aquellos que busquen cobijarse en su morada, quienes lo glorifican por ello, también está al servicio de ellos y de Asgard en su conjunto.
Componentes de juego:
1 miniatura de mirador asgardiano, 1 carta de «One Shot»
La estatua de este santuario fue esculpida con el mayor de los cuidados y una extrema atención por los detalles para que irradiara fuerza, belleza y una firme determinación. Además, el lugar prominente que ocupa en la estructura general del santuario ejemplifica la dualidad del papel que cumple un guerrero en la sociedad asgardiana: a la par que cuida con esmero de aquellos que busquen cobijarse en su morada, quienes lo glorifican por ello, también está al servicio de ellos y de Asgard en su conjunto.
